Año: 1955
Duración: 82 min.
País: España.
Director: Ignacio F. Iquino.
Guión: Ignacio F. Iquino, José Luis Dibildos, Alfonso Paso
Música: Augusto Algueró.
Fotografía: Isidoro Goldberger (B&W)
Reparto:
Viktor Staal, Laya Raki, Armando Moreno, Eugenio Domingo, Juan Albert, Enrique Fernández, Ramón Hernández.
Productora: I.F.I., Despa Film
Género: Cine negro.
Sinopsis:
Código: Seleccionar todo
Tamaño: 700,24 Mb.
Duración: 1,20 h.
Formato de AVI; MIME type=video/avi.
Video:
Codec: DX50 [DivX5]
Bitrate: 1201 Kbits/seg.
Ancho (pix.) x alto 640 x 480
Formato: 1.333 (4/3)
Fps: 25,00
Audio:
Codec: MP3 (MPEG-1, Layer 3)
Bitrate: 96 Kbits/seg.
Canales: 2 (Stereo)
Muestreo: 44.100 kHz
"Crítica de Quim Casals en filmaffinity
31 de julio de 2010
Hoy, la vista del pantano desde el lujoso Parador Nacional (otra construcción prototípica de esa época, y que años después tuvo una alta simbología histórica, ya que allí se redactó el Estatut catalán de 1979), rodeado de montes westernianos, es una de las más bellas de la comarca de Osona. El campanario románico del siglo XI sirve al visitante para calibrar de un vistazo el nivel del pantano: cuando está lleno, apenas emerge su punta triangular; en máxima sequía, incluso se puede penetrar en la iglesia. Así pues, aparte de las consideraciones meramente artísticas, el film constituye un importantísimo legado de memoria histórica, a la par que emotivo. Resulta inevitable una cierta desazón al ver las calles y las casas donde transcurrieron vidas, historias, amores, de gente que se vio obligada a abandonarlas sabiendo que serían engullidas por las aguas.
Fue Ignacio F. Iquino un todoterreno que dio lo mejor de sí, a mi entender, en el género negro, del que fue el máximo impulsor en España. Con todas las limitaciones presupuestarias de la más estricta serie B, se revela como un artesano, en el buen sentido de la palabra, hábil y eficaz, sin florituras autorales y gran pulso narrativo. Aquí destaca de manera especial el creciente y muy logrado suspense que se obtiene a partir de tres vectores paralelos: por un lado, cuando los bandidos son conscientes que están atrapados en el pueblo fantasma y falta una hora para que se abran las compuertas de la presa; por otro, el asedio al que les somete un guardia civil al que han herido pero al que necesitan porqué es el único que conoce una ruta de salida; y, finalmente, las tensiones internas cada vez más marcadas en el seno del grupo (cada personaje representa un simple y claro arquetipo de actitudes de la serie negra).
En definitiva, aunque estoy convencido que con estas premisas John Huston hubiera rodado una de sus grandes obras maestras, "Camino cortado" no deja de ser, a su escala mucho más modesta, un brillante peldaño de uno de los ciclos genéricos más estimulantes y merecedores de reivindicación de la historia del cine español."