Vista
Les Saignantes (2005). Yo me esperaba algo en la línea de
The Addiction (1995), pero queda lejos. Se trata de una distopía de corte feminista, con vocación de sátira política. En cierta manera, Godard en Camerún. Aparte de ese influjo (el tipo de voz en off, los carteles explicativos, la repetición de planos…), llama la atención su estética, entre gótica y futurista. Ayuda a aventurarse en esta experiencia que el director explote sin rubor el físico de sus dos actrices protagonistas, de cuerpos esbeltos, elásticos (no en vano una de ellas, la más guapa, era artista circense).
Y vista la sudafricana
Jerusalema (2008), magnífica crónica negra de la que todo el mundo hablaría si, por ejemplo, hubiera ganado el Oscar a la mejor película extranjera. No tiene la complejidad estructural de
Cidade de Deus (a pesar de que tampoco es lineal, es, digamos, “recordada”), pero tiene un personaje con mucha más fuerza.
Bien rodada, con un gran sentido del ritmo y un buen uso de la banda sonora. Frente al estereotipo del cine africano de aldea, se destaca por su ambiente urbano y sus interpretaciones profesionales, algunas brillantes. Una África creíble y alejada de la imagen folklórica que tanto gusta al turista europeo.
Que no tenga un desenlace ejemplarizante, que se describa con crudeza la realidad socio-económica de la nueva Sudáfrica, esa gran mentira, que incluso se concluya que te adaptas o pereces, que ésa es la única verdad, seguramente influyera a la hora de no considerarla para los grandes premios.
Así se hace un gángster. En fin, buen cine negro, la supervivencia, el ascenso, ¿la caída?, sin rehuir la crítica social, aunque sin caer en victimismos. Muy buena.
Gracias por la recomendación, Danyyyy. Eso sí, yo la vi
legendada; la traducción al castellano está llena de errores, no sé si por censura. Un ejemplo, ¿por qué dejaste la policía?, le preguntan a un gángster. Porque no ganaba lo suficiente, dice en la versión española. Porque la policía blanca nos trata como a mierda de gallina, se dice en realidad, cosa que recoge la versión en portugués.