He leído dos libros sobre el tema, uno de un autor inglés que no recuerdo (con los sospechosos habituales) y otro de la dama del crimen, P.D. James, mucho más interesante, que proponía como autor de las matanzas al pintor Walter Sickert. Escalofría un poco ver algunas de las pinturas de este hombre teniendo in mente la acusación de la James. Al lector queda estimar si es casualidad o algo más que la temática de algunos cuadros de Sickert sea, a veces, casi tan morbosa como los mismos crímenes: recuerdo una mujer desnuda en la cama sobre la que se proyecta la sombra de un hombre que escalofría a cualquiera.
Al margen del asunto, lo suyo es que los crímenes sean nocturnos, al menos en su plasmación cinematográfica. No recuerdo ese extremo, la verdad. Mi película favorita sobre el asunto sigue siendo Asesinato por decreto, de Bob Clark, realmente magnífica, aunque defienda la tesis, hoy ya obsoleta, de que la familia real inglesa estuvo involucrada.
Al margen del asunto, lo suyo es que los crímenes sean nocturnos, al menos en su plasmación cinematográfica. No recuerdo ese extremo, la verdad. Mi película favorita sobre el asunto sigue siendo Asesinato por decreto, de Bob Clark, realmente magnífica, aunque defienda la tesis, hoy ya obsoleta, de que la familia real inglesa estuvo involucrada.