No estoy del todo de acuerdo en que la mejor forma de entrar en contacto con el cine mudo sea a través del
slapstick, es cierto que tiene un lenguaje muy accesible a todo público y que suele gustar a la gente, no obstante que te guste el slapstick no tiene porqué significar que estás preparado para ver el resto de cine mudo, conozco gente a la que le gusta el splapstick pero que no disfruta o no le da oportunidades al resto del silente. Quizás sea porque el slapstick es mucho más cercano y nunca se ha dejado de hacer, siempre está vivo en dibujos animados, en todo tipo de gags cómicos y en Mr. Bean.
Es cierto que el cine mudo tiene un leguaje narrativo al que no estamos acostumbrados, principalmente porque jamás veremos una película muda en televisión a una hora "tempestiva", y a intempestivas cada vez es más raro; la mejor manera es recibir la historia como te la están contando y no rechazarla porque no sea la forma impuesta que hemos visto siempre en cine, con prejuicios fuera uno puede iniciarse con casi cualquier cosa, es cierto que quizá lo mejor sean películas "ligeras", aunque no tienen porqué ser comedias. Yo no llegué al silente a través de la comedia y me ha enganchado ( y de qué manera!).
Todas las formas de iniciarse que se han dicho, pues, me parecen buenas maneras aunque no hay fórmula mágica, que cada uno empiece por lo que más le interese y que sepa que hay tanta variedad como géneros existen y que no te guste la primera película que hayas visto sea de Griffith, Chaplin, Keaton, Linder, Lang, Pudovkin... no quiere decir que no te guste el cine mudo, es como desechar todo el cine sonoro porque no te gustó "Lo que le viento se llevó".
Silentes saludos